Sabéis que en nuestro centro tenemos pasión por el teatro. Este curso hemos asistido a cinco representaciones teatrales con alumnos pero el teatro es también parte de nuestra vida personal y una de las pasiones de las profesoras del Sorolla. Al fin y al cabo "All the world is a stage"/ "El mundo es un escenario" como bien dijo Shakespeare hace 5 siglos y sus palabras siguen aún vigentes. Precisamente esto es lo que hace a un autor y a sus obras universales, su vigencia y pervivencia a través de los tiempos.
Lo mismo sucede con el escritor irlandés Oscar Wilde, podemos pensar que ver La importancia de llamarse Ernesto hoy en día puede resultar anticuado pero el texto es tan poderoso, los personajes tan geniales y el mensaje tan mordaz, que en tiempos del postureo y el engaño con las redes sociales y apps, no puede haber nada más vigente ni una crítica a la falta de honestidad más inteligente. El título original de la obra: The Importance of Being Earnest, es un juego de palabras entre el nombre Ernest y "earnest", que significa honesto, honrado. Hay muchas mentiras aquí, como en tantos lugares comunes.
Ver una representación teatral es ver la percepción que el texto ha dejado en el director de la obra. Un texto literario tiene tantas miradas como lectores. A veces el montaje de un clásico nos puede decepcionar ,pero otras veces engrandece al texto. El toque moderno y musical, con un gusto exquisito de la versión dirigida por David Selvas, que se representa en el Teatro Pavón, han sido un acierto, con interpretes geniales, que saben cantar, con un espacio escénico que se transforma de Londres al campo durante una coreografía perfecta, con un vestuario colorido que nos transporta a La La Land o las pelis de Almodóvar y con personajes inmortales: John y Algy no pueden ser más canallas ni más divertidos, Silvia Marsó borda a Lady Bracknell y, cómo no, la ironía de Wilde y sus citas brillantes recorriendo el escenario de principio a fin.
Muy buena, moderna y alegre, genial. Ir al teatro nos abre la mente y nos hace disfrutar sin pantallas. 😄👌